06 septiembre 2009

Básica-mente

La diferencia fundamental entre el hombre y la mujer es la paciencia. Allí mismo radica el hecho de que una mujer perfectamente puede tomar el té hablando de zapatos con su peor enemiga, y también que un hombre pueda reventarse a golpes con alguien que dos días después va a estar jugando al PlaySation con él.

Así también observamos que mientras mi compañero de clase (hombre) planea matar al profe con una ballesta. Mi estrategia (mujer...) es un poco más compleja. Consiste básicamente en realizar ciertos avances en el campo de la genética, como para ser capaz de alterar el ADN del profesor con ciertas bases propias de los lemmings y sentarme a esperar que la naturaleza siga su curso. Tomando un té, por supuesto.








En serio no puedo creer que no sepas qué es un lemming, hacés que se me termine la paciencia. Hacé click acá por favor.



Y un poquito de nostalgia para los que tuvimos infancia (rara, por lo que veo, pero infancia al fin). Recordemos a estos simpáticos bichitos de pelo verde y TOC suicida.

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