Bueno, ya estamos en las puertas de fin de año, así que empieza la bajada.
Me queda un solo parcial, exoneré bioinorgánica y estuve una semana a puro ibuprofeno y alcohol en gel. Así que pongo música de bajada y encaro lo poquito que queda.
"¿Qué es la música de bajada?" se preguntarán muy pocos de ustedes.
Si bien puede referirse a Jack Johnson, Ray Charles, Jorge Drexler o Joaquín Sabina, o sea, canciones para relajarse en la recta final del día, en este post me refiero a un sub-género.
Es la música que acompaña la sensación de "uuuuuuuuuuuuuh fin de año, queda poquito, un último esfuerzo y ya". No son canciones particularmente buenas, pero son divertidas o bizarras. Dan ganas de aprovechar el calorcito y bailar (mal) en la playa al atardecer con una cerveza bien fría.
Una canción vale unas 351-352 palabras... más o menos
Después de muchísimo tiempo logramos hacer que mi padre cambiara el ringtone del celular (sigue teniendo uno horrible). Antes, desde que aparecieron los celulares que lo permiten, tenía justamente "la rubia en el avión".
ResponderEliminarBochorno por donde se lo mire! Cualquier reunión, familiar, amigos, negocios, cine... lo que quieras, sonaba esos primeros acordes "tum tum tum, con una rubia en el avión", y a mí se me ponía la piel de gallina.
Jajaja que nunca te pase.
ResponderEliminarMi papá tenía la del llanero solitario y lo más gracioso de todo es que (todavía hoy) es incapaz de tararearla. Tampoco puede tararear la de Misión Imposible.